El Hobbit será una trilogía
«En un agujero en el suelo vivía un hobbit». Con esta frase tan imaginativa describió J.R.R.Tolkien su primera inspiración para escribir El Hobbit. Fue hacia 1925, mientras corregía unos exámenes en su despacho de la Universidad de Oxford.
Tolkien dijo que aquél pensamiento fue casual, no premeditado. A partir de ahí lo desarrolló en un cuento para sus hijos, como un juego más. El regocijo de éstos le animó a enseñarlo a varios editores, que le propusieron publicarlo. La obra tuvo éxito y ello propició la continuidad con El Silmarillion y El Señor de los Anillos.
Lo anterior quiere decir que El Hobbit es quizá la producción de Tolkien más pura, más íntima dentro de su ciclo, pues no se hizo pensando en público alguno, a diferencia de las restantes. Esta obra es la que ahora se ha llevado al cine y tiene el estreno previsto para diciembre de 2012.
El Hobbit no es una secuela de la Trilogía sobre el Señor de los Anillos (La Comunidad del Anillo, Las dos Torres, El retorno del Rey). Por el contrario, es lo que se llama una precuela, la historia anterior a la ya conocida, de forma semejante a lo acaecido con las trilogías de Spiderman o de La Guerra de las Galaxias. No hay que pensar que esto sea una estrategia de marketing: Peter Jackson ya quiso rodar previamente El Hobbit, pero no pudo pues los derechos pertenecían a United Artists.
Así pues, la nueva película será dirigida –una vez más- por Jackson, una vez que Guillermo del Toro renunciara por los retrasos derivados de los problemas financieros de la M.G.Mayer. Se ha rodado también en Nueva Zelanda una vez superados los problemas con los sindicatos locales, y en ella repiten actores como Ian McKellen (Gandalf), Cate Blanchett (Galadriel) o Elijah Wood (Frodo). Según se dice, el estreno se hará en dos partes, una en diciembre de 2012 y otra en diciembre de 2013, siempre a principios de mes para aprovechar la campaña navideña. Ahora bien, tal como ha avisado Jackson, existe material rodado para una tercera película, por lo que la trilogía de El Hobbit puede darse por completada para fines de 2014.
La historia que se cuenta es la siguiente: el hobbit Bilbo Bolsón, que vive en la Comarca, es visitado por el mago Gandalf y un grupo de trece enanos liderados por Thorin, que le piden ayuda para arrebatar al dragón Smaug el tesoro de la Montaña Solitaria. En este empeño les suceden toda clase de aventuras.
Habrá que esperar a ver el film para opinar. De momento, pueden interesarnos particularmente algunos aspectos psicológicos de Tolkien relacionados con esta obra, y que aquí apenas podemos apuntar. Así, por ejemplo, el hecho de que este libro aborde las luchas épicas entre el bien y el mal sobre unos territorios hostiles y siendo acompañado el héroe de un grupo de camaradas. Hay que tener presente que la obra se escribe muy poco después de que el autor haya participado en un episodio equivalente, en la I Guerra Mundial, en el ejército británico como teniente segundo en una de las más terribles batallas contra los alemanes, la del Somme. Otro autor próximo, Robert Graves, tuvo una experiencia semejante y dejó escrito en Adios a todo esto sus experiencias en el frente.
Es curioso que tanto uno como otro intelectual se dedicaran a estudiar sagas y leyendas de tiempos muy lejanos al suyo, como si prefirieran correr un velo sobre su propia época. En el caso de Tolkien, parece que las montañas de sus aventuras rememorarían las de la adorada Sarehole de su niñez junto a Birmingham, y lo mismo podría decirse del bosque junto a la turbera de Moseley o las colinas de Clent o Lickey y otros paisajes de Worcestershire. Su afición a los idiomas muertos sería un retorno a la niñez, en la que su madre le enseñaba latín. Las dos torres podrían estar inspiradas en las de Perrot´s Folly y Edgbaston Waterworks, también de su infancia.
El mismo Gandalf sería, según indicó el propio escritor, un personaje inspirado en una pintura de Josef Madlener reflejada en una postal comprada por Tolkien en 1911 durante un viaje a Suiza poco antes de marchar a la guerra. En ese viaje se inspiró el del propio Bilbo Bolsón por las Montañas Nubladas acompañado de los trece enanos de Thorin; en la realidad, fue Tolkien quien lo recorrió con doce compañeros de excursión entre Interlaken y Lauterbrunnen, y allí vio las nieves perpetuas de Silberhorn y Jungfrau. ¿Habrá algo de todo este episodio idílico en la entrega de Peter Jackson?